El desarrollo de la maduración sexual en la pubertad facilita a que los adolescentes tomen conciencia de su propia sexualidad. Estos cambios provocan un aumento de las sensaciones eróticas y un deseo de probar sus capacidades.
Como adolescente debes comenzar a considerar lo siguiente:
- Percibir la sexualidad como una forma de obtener placer y de proporcionar placer a otro, a partir de las potencialidades del propio cuerpo.
- La sexualidad es una forma de compartir este placer con otra persona, como una manera de comunicación y de vinculación afectiva con la pareja
- La sexualidad como un medio para tener hijos de forma libre, deseada y responsable.
Es frecuente que en la adolescencia se viva la auto-producción de pensamientos o fantasías sexuales o sensuales, es darse cuenta que se puede sentir gran placer a través de estímulos visuales, táctiles o de las propias fantasías.
La importancia de estar informado.
Dentro de la normalidad también se encuentra el que aparezcan formas de comportamiento sexual en los adolescentes, como la masturbación o las fantasías sexuales, que sirven como una manera de entrenamiento que ayudarán a sentirse más competentes cara a una relación sexual futura con una pareja sexual.
Sin embargo, es innegable que algunos adolescentes llevarán su experimentación a comenzar a tener relaciones sexuales. Es de suma importancia que antes de dar este paso trascendental en la vida de las personas se este consciente de las consecuencias que esto puede tener, de tener la responsabilidad de saber en lo que esto puede llegar a derivar y entonces prepararse, no dejarse llevar por los impulsos puesto que esto ya no sólo es una cuestión que pueda afectar a la propia persona.
De manera general, hay que tener noción de lo siguiente:
La sexualidad entra dentro de la intimidad, las relaciones sexuales pertenecen a la intimidad de las personas, por lo que no es necesario compartir los detalles sobre las mismas, a no ser que se quiera hacer. Los padres, los pares y el entorno no deben presionar al adolescente.
Desarrollo de habilidades sociales y de auto-control, los impulsos sexuales dominan a los racionales durante la adolescencia, sobre todo al comienzo de la fase de adolescencia media, donde el joven ya ha desarrollado por completo sus órganos sexuales pero no el pensamiento adulto. La educación debe proveer al adolescente de conocimientos que le permitan desarrollar conductas y comportamientos sexuales correctos.
Existen riesgos, es vital dotar al adolescente de la información necesaria sobre los riesgos que traen las relaciones sexuales sin protección (embarazo precoz, Enfermedades de Transmisión Sexual, etcétera), así como de los beneficios que reporta practicar sexo seguro.
Algunos datos de la OMS sobre embarazo adolescente.2
- Unos 16 millones de muchachas de 15 a19 años y aproximadamente 1 millón de niñas menores de 15 años dan a luz cada año, la mayoría en países de ingresos bajos y medianos.
- Las complicaciones durante el embarazo y el parto son la segunda causa de muerte entre las muchachas de 15 a19 años en todo el mundo.
- Cada año, unos 3 millones de muchachas de 15 a 19 años se someten a abortos peligrosos.
- Los bebés de madres adolescentes se enfrentan a un riesgo considerablemente superior de morir que los nacidos de mujeres de 20 a 24 años.
Es conveniente anticiparse1
Ante estas situaciones es conveniente que los jóvenes hayan recibido información sexual completa antes de de entrar a la adolescencia, puesto que por sus característica la sexualidad se convierte en un tema íntimo que el adolescente difícilmente deseará compartir con sus padres u otros adultos, generalmente se busca con amigos y eso generalmente no es lo más indicado porque pueden estar tan o menos informado que ellos mismos.
La educación sexual como mínimo debe cumplir con lo siguiente:
- Dar un conocimiento adecuado de la sexualidad y sus diferentes significados. Se debe tener cuidado y detectar en los púberes si hay indicios de erotofobia unida a la sexualidad que se inicia en esta etapa y que podría generar sentimientos de culpa.}
- Plantear los riesgos que puede acarrear una sexualidad sin control anticonceptivo ni prevención de las ETS.
- Proporcionar datos concretos sobre los métodos anticonceptivos eficaces. Dar pautas para que sepa como comunicarse y ponerse de acuerdo con su pareja sexual acerca del uso de estos y exigiéndolo si es preciso.
- Dar los elementos para que pueda sentirse cómod@ ante las contradicciones que puede suponer el inicio de una actividad sexual: cada uno tiene sus propios valores éticos y características psicológicas, hay que estar educados para reconocer y respetar las diferencias.
REFERENCIAS:
1) Farré, J.(2014). Psicología para todos, guía completa para el crecimiento personal. Editorial OCEANO.
2) OMS. El ambarazo en la adolescencia. Recuperado en línea el 19 de junio de 2016 de http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs364/es/